¿Qué son las ondas de choque?
Las ondas de choque son ondas acústicas que se utilizan en la medicina para tratar diversas afecciones musculares y óseas. Estas ondas sonoras de alta intensidad se generan a través de un dispositivo que transmite energía mecánica en forma de ondas de presión. Este tratamiento no invasivo se ha convertido en una alternativa popular a la cirugía para muchos pacientes que experimentan dolor crónico.
¿Cómo funcionan las ondas de choque?
Las ondas de choque trabajan en el tejido afectado al aumentar la circulación sanguínea y la regeneración celular. Cuando las ondas de choque penetran en el tejido, estimulan la producción de células que ayudan a reparar y regenerar la zona afectada. La terapia de ondas de choque también puede descomponer las calcificaciones y mejorar la movilidad en la articulación.
¿Para qué se utilizan las ondas de choque?
Las ondas de choque se utilizan para tratar una variedad de afecciones, como la tendinitis, fascitis plantar, espolón calcáneo, bursitis, y dolor de espalda crónico. También se han utilizado para tratar el síndrome del túnel carpiano, la disfunción eréctil, y la enfermedad de Peyronie. Las ondas de choque se consideran una alternativa segura y efectiva a la cirugía para muchos pacientes.
Ejemplo de tratamiento con ondas de choque.
Un ejemplo de tratamiento con ondas de choque es el dolor de espalda crónico. Durante el tratamiento, un dispositivo de ondas de choque se aplica a la zona afectada de la espalda. Las ondas de choque penetran en la piel y los tejidos blandos, estimulando la regeneración celular y mejorando la circulación sanguínea. El tratamiento puede durar de 10 a 30 minutos y generalmente se requieren varias sesiones para lograr un alivio completo del dolor. Los pacientes pueden experimentar una leve incomodidad durante el tratamiento, pero en general, las ondas de choque no son dolorosas.
